Esta semana ya parece que Laura va más contenta al colegio, aunque el equilibrio es un poco inestable.
Hoy ha bajado las escaleras y ha ido corriendo a su clase muy alegre pero al llegar se ha encontrado a una amiguita que estaba llorando y, para no ser menos, ella también se ha puesto a llorar.
También Alex ha pasado hoy un pequeño mal rato. Al llegar al patio del colegio su clase ya había subido y cuando le ha dicho Isabel que subiera sólo se le ha venido el mundo encima porque no sabía cómo llegar. Menos mal que había un profesor por allí que le ha ayudado a llegar y le ha dicho que no se preocupara por esas cosas... pero es que él no conoce a Alex.
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